lunes, 14 de noviembre de 2016

A metros de fin de año

Cada año viene con su cuota de sensaciones y experiencias.

En lo personal este 2016 fue muy raro, me tuve que dar cuenta que la vida puede cambiar en instantes, lo que uno no puede cambiar en la vida. Ha sido un año que no voy a olvidar por haber sido más productivo que otros a pesar de haber sido por lejos el más difícil.
Y qué año este 2016. Un año en que de manera inexplicable todo lo que viví es causa y consecuencia de un mismo evento desafortunado, que se mantiene como un eje de cada acción, cada reacción, cada inacción. No sólo para mí sino también para terceros, algo que encuentro tan raro como inexplicable.

Estamos en la cuenta regresiva, los días finales del año.
Para estos días muchos ya sabemos cómo queremos terminar el año e hicimos un conteo de como nos fue, que conseguimos y que perdimos.
En mi caso, siempre empiezo contando los viajes, es lo que más le suma a la cuenta de fin de año. Hasta hoy, hice 4 viajes fuera de la ciudad y de la rutina.
En segundo lugar cuento a las personas, todas con las que haya contactado. Tomo lo que me regalado en esos contactos: la compañía, las experiencias, las charlas, los resultados que me hayan provocado sus influencias, etc. Esto también suma (es contar regalos, suma si o sí).
En tercer lugar las actividades personales. Si me propuse algo, si logré hacerme caso; si aprendí, si fallé, si descubrí o si re-descubrí. Este es el que resta, es donde más me castigo, digo: No hice "tal" o "cuál" cosa.  Porque en algún momento quise y no se pudo, da igual el motivo o la excusa, como también da igual si estoy o no arrepentido. Aunque yo en ese sentido siempre digo "no te podes arrepentir de lo que no hiciste, por algo no lo hiciste", confiando más en la frase que en la inacción.
Y este año las cuentas me resultan positivas, y si es así porqué dejar que el tercer lugar me afecte? Si no se puede todo, además no hay por qué castigarse tanto, todavía estoy a tiempo, soy joven.



Lo que siempre es importante: ¿Qué aprendí?

  • Podemos ser dueños de nuestros pensamientos y ser arquitectos de nuestros propios actos, pero no controlamos nuestro destino.
  • Las decisiones nos pueden tomar a nosotros.
  • Lo que queremos puede transformarse en una irrelevancia absoluta o en querer más y ambas son insatisfactorias.
  • Nuestra capacidad es dependiente de las motivaciones, de las agallas y de las circunstancias.
  • Serás lo que quieras ser haciendo uso de la consistencia y la paciencia en partes iguales.
  • No existe "hacer correctamente", existe hacer diferente. Cada uno tiene sus razones y sus tiempos. El mundo se mueve a distintas velocidades.
  • No hay que confundir Razones con Excusas.
  • Algunos errores no pueden perdonarse pero sí redimirse.
  • Algunas veces hay que buscar la manera.
  • "El tiempo pone todo en su lugar"
  • "De los 18 a los 23 años es una etapa compleja, tenes que decidir si queres trabajar o estudiar y en qué campo"
Hay que aceptar que el año no terminó, todavía queda -fin de año- (el último mes) pero ese un trámite aparte ¿Verdad?
"El año no tiene nada que ver" dirán algunos, yo digo que cada año deja sus resultados y nos sigue influyendo por el resto de la historia. No hablo de arrastrarlo sino como dato cronológico, como las publicaciones de facebook o algo así.

¿Cómo es tu cuenta? ¿Cómo te trato este año? ¿Que aprendiste?
Podes comentar más abajo y también compartirlo.
Saludos, #UnJovenRazonable.

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